AGRICULTURA ECOLÓGICA

AGRICULTURA INTENSIVA: El actual modelo de agricultura busca un máximo de aprovechamiento de los recursos naturales del suelo empleando para ello la tecnología. Se estima que el 32% de la superficie terrestre se utiliza para uso agrícola de cultivo o pastos. Gracias a la mejora de semillas y las prácticas agronómicas los rendimientos por hectárea se han multiplicado. En 1950 una hectárea daba de comer a dos personas. En 2005 era capaz de hacerlo con más de cuatro y se estima que en 2030 esa misma superficie podrá alimentar a cinco individuos. Las nuevas tecnologías permiten cultivar cada terreno en función de sus necesidades de fertilizantes, agua y fitosanitarios según la orografía, el tipo de suelo y utilizando técnicas agronómicamente sostenibles. Sistemas permiten calcular la concentración de azúcares, proteínas y fibra que contiene una muestra de forraje a la vez que se recolecta. Sistemas de precisión emplean GPS para el guiado automático, capaz de reflejar en un mapa las diferencias de producción de unas zonas a otras para en años sucesivos aplicar únicamente las cantidades necesarias de fertilizantes. Sistemas de recogida son capaces de diferenciar y recoger los distintos tipos de uvas y separarlas en diferentes tolvas.